Adquirir una nueva casa es un proceso lleno de emociones y mucha felicidad. Una nueva etapa de nuestra vida acaba de comenzar, lo cual nos motiva a mantener nuestra vivienda segura contra cualquier imprevisto que pueda suceder. Por lo tanto, el seguro que vayas a elegir para tu nueva casa debe ser capaz de ayudarte a solucionar posibles inconvenientes en tu hogar.
No obstante, es importante señalar que si tu vivienda no está hipotecada, no es obligatorio contratar un seguro de hogar, ya que sólo los bienes hipotecados según el artículo 8 de la Ley 2/1981, de 25 de marzo de regulación del mercado hipotecario, deben estar asegurados contra daños por el valor de tasación.
Por esta razón, un cuarto de todos los hogares en España no cuenta con un seguro para su hogar, pero la recomendación de contratar un seguro de este tipo va más allá de la obligatoriedad y recae en los enormes beneficios que este aporta.
Aunque contar con un seguro es un proceso de carácter voluntario en algunos casos, como hemos visto, la recomendación general es mantener a nuestra vivienda segura de accidentes y sucesos desafortunados.
Sin embargo, conocer las características de tu vivienda, como su tamaño, ubicación y dimensiones, es fundamental para que logres conseguir un seguro que se adapte totalmente a lo que estás buscando.
Qué vas a encontrar en este artículo :)
Encuentra una opción que se adapte a tus necesidades
Muchas personas creen erróneamente que aceptar el seguro ofrecido por la entidad bancaria al momento de firmar la hipoteca es obligatorio. Es importante saber que esto no es cierto, pues tenemos total libertad de elección si consideramos que dicho seguro no cumple con lo que estamos buscando.
Para determinar el precio final de un seguro de hogar es crucial realizar un estudio detallado de tu vivienda. La fecha de construcción del inmueble, las cargas de la vivienda, el uso del hogar (habitual, segunda residencia o en alquiler) y la cantidad de personas que viven en ella son solo algunos de los factores que decidirán el valor del seguro.
Evidentemente, es probable que no necesites ciertas coberturas que un seguro puede llegar a ofrecer. Analizar detalladamente nuestras necesidades es la clave para encontrar un seguro de hogar que nos beneficie en relación calidad-precio.
Del mismo modo, es indispensable observar la trayectoria de la compañía de seguros. Esto nos va a brindar un panorama más amplio para saber si estamos tomando la decisión correcta.
Beneficios de contar con un seguro de hogar
Es necesario señalar que un seguro de hogar tiene la obligación de cubrir cualquier tipo de daño causado en el interior y exterior de una vivienda. Además, en caso de existir perjuicios a terceros, el seguro también debe cubrir estos daños involuntarios. Aunque las coberturas del seguro dependen mucho de tu plan, existen ciertos beneficios básicos que aplican de manera frecuente.
- Tu hogar estará protegido contra fenómenos naturales, como inundaciones, tormentas y más.
- En caso de incendio o robo, el seguro te ayudará a reponer los daños existentes.
- Si existen daños por agua dentro del hogar, el seguro cubrirá los gastos de deterioro derivados del agua.
- Defensa y asesoría jurídica continua ante posibles disputas con vecinos, inquilinos o arrendadores.
- Responsabilidad civil para cubrir los gastos de daños causados a una tercera persona.
¿Qué pasa si decido no contratar un seguro de hogar en mi nueva casa?
Ningún hogar es inmune a los accidentes. Nunca sabemos cuándo un evento desafortunado puede acontecer, por lo que lo mejor es estar siempre preparados. Esto no quiere decir que debamos vivir con eterno pesimismo, pero contar con un seguro de hogar nos brindará una solución eficiente a las incidencias domésticas que puedan suceder.
Por ejemplo, ¿Qué ocurre si estando fuera el fin de semana tenemos una avería habitual y se rompe el latiguillo que une la cisterna con la pared? Esto es uno de los siniestros más comunes por un mantenimiento defectuoso de la fontanería. Podríamos volver del relajante fin de semana y darnos cuenta de que tenemos el piso inundado con numerosos daños por el agua, que además se agravarían porque se ha filtrado agua al piso del vecino de abajo, y tenemos que asumir el coste de la reparación del techo y daños de su vivienda, y ¿Quién pagaría este sobre coste de la factura de agua? Imagínate la diferencia de tener un respaldo que te cubra estos 3 siniestros, y la posibilidad de ir a un hotel pagado hasta que reparen tu vivienda.
Por supuesto
Invertir en un seguro de hogar es sinónimo de cuidar nuestra vivienda. Al fin y al cabo, nuestra economía se verá más afectada si cubrimos alguno de estos gastos de manera directa. Se supone que nuestra casa es nuestro lugar seguro, un hogar donde debe reinar la tranquilidad y la comodidad. En definitiva, no podemos controlar los robos, incendios u otros tipos de accidentes domésticos, pero sí podemos proteger a nuestro bolsillo al contratar un seguro de hogar.