La Costa Blanca emerge como un nuevo destino para residencias exclusivas.
En los últimos años, la Costa Blanca ha ganado popularidad como un destino de lujo, rivalizando con localidades tradicionales como Marbella.
Zonas como La Nucía, Altea, Benidorm y Calpe se destacan por sus impresionantes propiedades y la creciente demanda de clientes extranjeros.
Qué vas a encontrar en este artículo :)
La Nucía: Vive el encanto de la Costa Blanca
La Nucía, situada en la provincia de Alicante, a tan sólo 5 minutos de Benidorm, ha experimentado un notable crecimiento en su población en los últimos años, impulsado en gran medida por el auge del sector inmobiliario.
Este municipio ha visto aumentar su atractivo tanto para residentes nacionales como internacionales, debido a su clima privilegiado, infraestructuras modernas y una calidad de vida elevada.
El desarrollo de urbanizaciones y la construcción de nuevas viviendas han sido factores clave que han atraído a nuevos habitantes, además de incentivar la inversión en propiedades vacacionales y residenciales. Como resultado, La Nucía se ha consolidado como un destino emergente en el mercado inmobiliario de la Costa Blanca, reflejando un crecimiento demográfico paralelo a la expansión de este sector.
Prueba de ello cabe resaltar, el tremendo éxito que está teniendo la venta de Villas de lujo en urbanizaciones de la zona, como por ejemplo, la promoción Noa Garden, que actualmente está siendo comercializada por la agencia inmobiliaria Mediterránean Properties.
Altea: El encanto del Mediterráneo
Altea, conocida por su pintoresco casco antiguo y su distintiva cúpula azul de su iglesia, se ha convertido en un imán para los compradores de viviendas de lujo. Las propiedades en Altea Hills ofrecen vistas panorámicas al mar y privacidad total, atrayendo a compradores de alto nivel de toda Europa. «La combinación de tranquilidad y exclusividad hace de Altea un lugar único para vivir», comenta María López, una agente inmobiliaria local.
Benidorm: Más allá de los rascacielos
Benidorm, famoso por sus playas y rascacielos, también alberga algunas de las propiedades más exclusivas de la Costa Blanca. Urbanizaciones con villas de lujo con todas las comodidades imaginables, desde piscinas infinitas hasta spas privados. «Hemos visto un aumento significativo en la demanda de propiedades de alta gama en Benidorm, especialmente entre inversores británicos y escandinavos», señala Javier Martínez, experto en gestión de bienes inmuebles.
Calpe: Naturaleza y sofisticación
Calpe, con su icónico Peñón de Ifach y playas de aguas cristalinas, se ha posicionado como otro punto clave para el mercado de lujo. Las villas modernas con diseños vanguardistas y vistas impresionantes al mar están en auge, atrayendo a compradores de Alemania, Suiza y Rusia. «Calpe ofrece un equilibrio perfecto entre naturaleza y sofisticación, lo que la hace muy atractiva para el comprador internacional», afirma Ana María Guillem, asesora inmobiliaria.
Demanda internacional en aumento
La Costa Blanca ha visto un notable incremento en la demanda de viviendas de lujo por parte de clientes extranjeros. La excelente calidad de vida, el clima soleado y las conexiones internacionales han sido factores determinantes en esta tendencia. «Cada vez más personas buscan una segunda residencia en la Costa Blanca, atraídas por su belleza natural y sus excelentes infraestructuras», comenta Tomás Pérez Diezma, director de una agencia inmobiliaria en Alicante.
Un mercado en expansión
Con el creciente interés de compradores internacionales y el desarrollo de nuevas propiedades exclusivas, la Costa Blanca está consolidándose como una alternativa seria a destinos tradicionales de lujo en España. «La diversidad de opciones y el encanto único de cada localidad hacen de esta región un verdadero paraíso para quienes buscan viviendas de lujo», concluye Pérez.
La Costa Blanca, con sus diversos y encantadores rincones, se está posicionando firmemente en el mapa de las viviendas exclusivas, ofreciendo alternativas a los tradicionales destinos de lujo y captando la atención de un público internacional exigente.